InicioFisioterapia después de lesiones y cirugías: Recuperación y rehabilitaciónGuía detallada de recuperación tras una fractura del esternón

Guía detallada de recuperación tras una fractura del esternón

fractura del esternón

Descubre las causas, síntomas y cuándo acudir al médico si sufres una fractura del esternón. Guía detallada y profesional sobre esta lesión torácica.

La fractura del esternón es una lesión poco frecuente pero potencialmente seria que puede afectar significativamente la calidad de vida si no se trata adecuadamente. Aunque suele estar relacionada con traumatismos torácicos directos, también puede producirse durante maniobras médicas como la reanimación cardiopulmonar (RCP). A lo largo de esta guía, exploramos las causas, los síntomas y las estrategias de evaluación y seguimiento clínico tras una fractura del esternón, siempre desde una perspectiva basada en la evidencia y centrada en la recuperación funcional.

Causas de la fractura del esternón: factores de riesgo clave

Mecanismos comunes de la fractura del esternón

Uno de los mecanismos más frecuentes de la fractura del esternón es el traumatismo directo en el tórax, común en accidentes automovilísticos. El impacto del pecho contra el volante o el cinturón de seguridad puede generar suficiente fuerza para fracturar este hueso plano y resistente. También puede observarse en deportes de contacto como el rugby o artes marciales, donde el choque torácico es habitual.

En algunos casos, la fractura no es inmediata, sino resultado de estrés repetitivo sobre la estructura ósea del esternón, especialmente en deportistas de alto rendimiento.

Condiciones predisponentes que aumentan el riesgo de fractura

Factores como la osteoporosis, el envejecimiento óseo y enfermedades metabólicas como la osteomalacia pueden debilitar el esternón. Esto aumenta la probabilidad de sufrir una fractura del esternón incluso con traumatismos leves.

En la población geriátrica, la combinación de fragilidad ósea y menor masa muscular protectora incrementa el riesgo. Además, ciertos tratamientos farmacológicos como los corticosteroides a largo plazo también pueden estar implicados.

Fractura del esternón relacionada con la RCP en entornos médicos

Durante la reanimación cardiopulmonar (RCP), especialmente en maniobras intensas o prolongadas, puede ocurrir una fractura del esternón como efecto secundario. Aunque es una consecuencia poco común, se ha documentado en la literatura médica como una posible complicación, especialmente en pacientes mayores o con huesos debilitados.

Según un estudio reciente publicado en MDPI (MDPI), la fractura esternal asociada a la RCP sigue siendo un desafío diagnóstico, ya que puede confundirse con otras causas de dolor torácico post-reanimación.

Síntomas y manifestación clínica de la fractura del esternón

Síntomas y signos típicos

El síntoma más frecuente de una fractura del esternón es el dolor torácico localizado. Este dolor suele empeorar con la respiración profunda, la tos o cualquier movimiento que implique tensión del tórax, como levantar objetos o incorporarse desde una posición horizontal.

Otros síntomas incluyen:

  • Sensibilidad al tacto en la zona central del pecho.

  • Aparición de hematomas o inflamación superficial.

  • En algunos casos, sensación de crujido (crepitación) al mover el tronco o al respirar.

Hallazgos durante el examen físico

En la evaluación médica, el especialista puede detectar mediante palpación la presencia de puntos dolorosos específicos, deformidad del hueso esternal o movilidad anormal. La fractura del esternón puede también provocar una respiración superficial, debido al dolor que genera el movimiento torácico profundo.

Para confirmar el diagnóstico, se utilizan pruebas de imagen como la radiografía torácica o la tomografía computarizada (TC). En pacientes con dolor torácico tras un traumatismo, estas herramientas son esenciales para descartar otras lesiones más graves.

Cuándo buscar una evaluación médica urgente

Es fundamental acudir a atención médica inmediata si aparecen síntomas como:

  • Dolor agudo en el pecho tras un golpe directo.

  • Dificultad para respirar.

  • Mareos o pérdida de conciencia.

  • Dolor que no mejora en reposo.

Algunas lesiones internas pueden pasar desapercibidas si no se realiza una evaluación completa. Según una publicación en ResearchGate (ResearchGate), hay casos en los que la fractura del esternón no se diagnostica inicialmente, lo que puede retrasar el tratamiento y complicar la recuperación.


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Fisioterapia para la fractura del esternón: un papel crucial en la recuperación

Cuándo comenzar la fisioterapia tras una fractura del esternón

El momento óptimo para iniciar la fisioterapia depende de la gravedad de la fractura del esternón y del estado general del paciente. En fracturas no desplazadas y sin complicaciones, la intervención fisioterapéutica puede comenzar en los primeros días, enfocándose en técnicas suaves de respiración y control del dolor.

Una evaluación inicial por parte de un fisioterapeuta permite establecer un plan seguro y progresivo. Es esencial evitar el reposo prolongado, ya que la inmovilidad puede causar rigidez torácica y debilidad muscular. A medida que el dolor disminuye y el proceso de consolidación ósea avanza, se amplía el programa con ejercicios más activos.

Según un estudio publicado en ResearchGate, la intervención temprana en lesiones esternales facilita la reeducación funcional sin incrementar el riesgo de complicaciones (ResearchGate).

Ejercicios respiratorios y de corrección postural

En los primeros días tras una fractura del esternón, la respiración puede volverse superficial debido al dolor. Esto aumenta el riesgo de complicaciones respiratorias como atelectasias o infecciones. Por ello, los ejercicios respiratorios son fundamentales:

  • Respiración diafragmática controlada

  • Ejercicios de expansión torácica

  • Uso de espirómetros incentivadores

Estos ejercicios se combinan con la corrección postural, ya que los pacientes tienden a encorvarse para reducir el dolor. Una postura cifótica prolongada puede afectar la mecánica respiratoria y generar tensiones compensatorias. La fisioterapia ayuda a restaurar el alineamiento correcto de la columna torácica y cervical.

Progresión de la actividad y retorno a la función normal

A medida que la fractura del esternón consolida, se introduce un plan de progresión funcional individualizado. Este incluye:

  • Ejercicios de movilidad torácica

  • Fortalecimiento de la musculatura escapular y dorsal

  • Reeducación postural dinámica

El objetivo es preparar al paciente para retomar sus actividades cotidianas con seguridad. En deportistas o personas físicamente activas, el retorno progresivo al entrenamiento se realiza bajo supervisión. Se presta especial atención al control del movimiento, la estabilidad central (core) y la prevención de recidivas.


Tratamiento quirúrgico para la fractura del esternón: cuándo considerar la cirugía

Indicaciones para la intervención quirúrgica

Aunque la mayoría de las fracturas del esternón se tratan de forma conservadora, existen casos en los que la cirugía es necesaria. Las indicaciones comunes incluyen:

  • Fracturas desplazadas con inestabilidad mecánica

  • Lesiones abiertas o con compromiso de piel

  • Lesiones asociadas a estructuras mediastínicas (corazón, vasos grandes)

  • Fracaso del tratamiento conservador tras varias semanas

Estas situaciones requieren una evaluación interdisciplinaria urgente y, en muchos casos, hospitalización inmediata.

Técnicas de fijación quirúrgica

Las técnicas quirúrgicas para estabilizar una fractura del esternón incluyen la osteosíntesis con placas de titanio y tornillos de bajo perfil. El objetivo es restaurar la alineación anatómica del hueso, permitir una respiración eficaz y reducir el dolor asociado al movimiento torácico.

La cirugía se realiza generalmente bajo anestesia general, con incisión mínima y control radiológico intraoperatorio. El riesgo de complicaciones es bajo cuando se aplica una técnica adecuada y en un entorno especializado.

Cuidados postoperatorios y tiempos de recuperación

El cuidado posterior a la cirugía incluye analgesia eficaz, control de la herida quirúrgica y fisioterapia precoz. La movilización suave se inicia a las 24–48 horas para prevenir complicaciones respiratorias.

La recuperación completa tras cirugía por fractura del esternón puede tardar de 8 a 12 semanas. Durante este período se recomienda:

  • Evitar levantar cargas pesadas

  • Realizar ejercicios de respiración guiados

  • Participar en sesiones regulares de fisioterapia para movilidad y fortalecimiento


Cómo diagnosticar una fractura del esternón: técnicas de imagen

Radiografía de tórax y su valor diagnóstico

La radiografía de tórax es el estudio inicial más utilizado para identificar una fractura del esternón. Proporciona una imagen rápida y accesible de la región torácica anterior, aunque puede tener limitaciones en fracturas no desplazadas.

Se recomienda realizarla en vista lateral para una mejor visualización del esternón. Aunque es menos sensible que otras técnicas, su valor inicial es alto, especialmente en entornos de urgencia.

Tomografía computarizada en casos graves de fractura del esternón

La tomografía computarizada (TC) es la herramienta de elección en fracturas complejas o cuando hay sospecha de compromiso interno. Proporciona imágenes en alta resolución y permite visualizar detalles óseos y tejidos blandos del mediastino.

Según investigaciones recientes publicadas en MDPI, la TC permite un diagnóstico más preciso de la fractura del esternón en pacientes politraumatizados y en casos con múltiples lesiones asociadas (MDPI).

Papel del ultrasonido en el diagnóstico de emergencia

El ultrasonido torácico se utiliza cada vez más en entornos de emergencia para valorar lesiones torácicas superficiales. Aunque no reemplaza la radiografía o la TC, puede detectar discontinuidades óseas y hematomas subcutáneos.

Es especialmente útil en pacientes inestables donde el traslado al escáner no es viable. Además, permite valorar de forma rápida la función pulmonar y la presencia de líquido pleural.


Liberación miofascial, movilización y técnicas suaves de columna para el manejo de escoliosis leve

Reeducación postural y movimiento funcional

La corrección postural es fundamental en pacientes con escoliosis leve o alteraciones biomecánicas tras una fractura del esternón. Las técnicas de reeducación neuromuscular ayudan a restaurar el equilibrio entre cadenas musculares y mejorar la alineación de la columna.

Se incorporan ejercicios funcionales para recuperar simetría y control motor, especialmente en movimientos del tronco y miembros superiores.

Técnicas de respiración y activación del core

La respiración diafragmática profunda es esencial tanto en la recuperación de la fractura del esternón como en la mejora de la postura. Esta técnica fortalece el core interno, mejora la estabilidad lumbopélvica y reduce la tensión torácica.

Se complementa con ejercicios de activación del transverso abdominal y suelo pélvico, enfocándose en estabilidad profunda y eficiencia respiratoria.

Fractura del esternón: lesiones asociadas en corazón, pulmones y costillas

Complicaciones cardiopulmonares tras el traumatismo

Una fractura del esternón rara vez ocurre de forma aislada, especialmente en traumatismos de alta energía como los accidentes de tráfico. En estos casos, pueden verse comprometidas estructuras vitales como el corazón y los pulmones. Las complicaciones cardiopulmonares más frecuentes incluyen:

  • Contusión miocárdica: una lesión del músculo cardíaco que puede alterar el ritmo o la función del corazón.

  • Hemotórax: acumulación de sangre en la cavidad pleural que dificulta la expansión pulmonar.

  • Neumotórax: colapso pulmonar parcial o total por entrada de aire en el espacio pleural.

  • Derrame pericárdico: presencia de líquido alrededor del corazón.

Estas situaciones requieren vigilancia intensiva y en muchos casos hospitalización inmediata. Según el análisis publicado en MDPI, una evaluación rápida y multidisciplinaria mejora los desenlaces en pacientes con fractura del esternón y afectación torácica interna (MDPI).

Fracturas costales y su relación con la fractura del esternón

Es común que una fractura del esternón se presente junto a fracturas en las costillas, especialmente en los arcos anteriores. Esta combinación incrementa el dolor torácico y dificulta la respiración, aumentando el riesgo de complicaciones respiratorias.

La biomecánica de la caja torácica hace que un traumatismo central afecte simultáneamente esternón y costillas, particularmente del segundo al sexto arco. Cuando estas lesiones coexisten, el plan terapéutico debe ser más cuidadoso, especialmente en cuanto al control del dolor y la movilización progresiva.

Lesiones internas que requieren hospitalización

Además del daño óseo, una fractura del esternón puede estar acompañada por lesiones internas graves como:

  • Lesiones cardíacas: contusión, arritmias o ruptura del pericardio.

  • Lesiones pulmonares: laceración o contusión pulmonar con insuficiencia respiratoria.

  • Lesiones vasculares: daño en la arteria mamaria interna o grandes vasos mediastínicos.

Estos casos se manejan en unidades de cuidados intensivos con monitoreo continuo, estudios de imagen avanzados y, en ocasiones, intervención quirúrgica inmediata. El diagnóstico precoz y la atención especializada son claves para evitar desenlaces fatales.


Manejo conservador de la fractura del esternón: enfoques no quirúrgicos

Manejo del dolor y tratamiento farmacológico

En la mayoría de los casos, la fractura del esternón se trata de forma conservadora, sin necesidad de cirugía. El control del dolor es la primera prioridad. El objetivo es permitir que el paciente respire adecuadamente, evite la hipoventilación y pueda iniciar la movilización temprana.

Se utilizan comúnmente:

  • Analgésicos simples (paracetamol)

  • Antiinflamatorios no esteroideos (ibuprofeno, naproxeno)

  • En casos graves, opioides de acción corta bajo estricta supervisión

Según ResearchGate, un control eficaz del dolor reduce la duración de la hospitalización y mejora la función pulmonar en pacientes con fractura del esternón (ResearchGate).

Posiciones recomendadas de reposo y limitaciones de movimiento

Durante las primeras dos semanas, se recomienda reposo relativo en posiciones que reduzcan la presión sobre el esternón:

  • Dormir en posición semisentada o con respaldo elevado

  • Evitar posiciones decúbito prono (boca abajo)

  • Evitar rotaciones bruscas del tronco y levantamiento de objetos pesados

Es importante mantener una movilidad leve y progresiva para prevenir rigidez torácica, debilidad de la musculatura respiratoria y trombosis venosa profunda.

Ejercicios respiratorios y seguridad del paciente en casa

Una de las complicaciones más temidas tras una fractura del esternón es la neumonía, debido a la disminución de la ventilación profunda. Por eso, es esencial educar al paciente en técnicas de respiración y pautas de seguridad domiciliaria:

  • Inspiraciones profundas cada hora

  • Uso de espirómetro incentivador

  • Tos asistida para limpieza bronquial

Además, se deben evitar riesgos domésticos como caídas, que podrían agravar la lesión. Es recomendable eliminar obstáculos del entorno, usar sillas con respaldo firme y contar con ayuda para tareas cotidianas durante las primeras semanas.


Tiempo de recuperación y pronóstico tras una fractura del esternón

Duración promedio de curación según tipo de fractura

El tiempo medio de recuperación de una fractura del esternón varía según la gravedad. En fracturas no desplazadas, la consolidación ósea suele completarse en 6–8 semanas. En cambio, si existe desplazamiento o compromiso asociado, el tiempo se puede extender hasta 10–12 semanas.

Factores como edad avanzada, comorbilidades (diabetes, osteoporosis), tabaquismo o tratamientos inmunosupresores pueden ralentizar este proceso.

Factores que afectan la recuperación individual

Cada paciente evoluciona de forma diferente. Algunos de los principales factores que afectan el ritmo de recuperación tras una fractura del esternón son:

  • Edad biológica y estado general de salud

  • Nivel de actividad física previo

  • Calidad del soporte familiar y social

  • Acceso a fisioterapia especializada

  • Adherencia al tratamiento y a las recomendaciones posturales

El apoyo de un equipo multidisciplinario puede acelerar la recuperación y prevenir secuelas.

Resultados a largo plazo y posibles complicaciones

En la mayoría de los casos, la recuperación es completa. Sin embargo, un pequeño porcentaje de pacientes puede experimentar:

  • Dolor torácico crónico o persistente

  • Disfunción respiratoria leve

  • Cambios posturales adquiridos (hipercifosis)

  • Síndrome de dolor miofascial en la zona esternal

En estos casos, la combinación de fisioterapia manual, técnicas de liberación miofascial y ejercicios de estabilización central puede ser útil para mejorar la funcionalidad.

Prevención y educación para la fractura del esternón

Cómo prevenir lesiones traumáticas en el pecho

La fractura del esternón puede prevenirse en gran medida si se reducen los factores de riesgo de traumatismos torácicos. En el ámbito general, esto incluye:

  • Uso del cinturón de seguridad correctamente ajustado

  • Evitar conductas de riesgo al volante

  • Mantener la densidad ósea adecuada, especialmente en adultos mayores

Además, en personas con enfermedades óseas como la osteoporosis, es fundamental realizar revisiones periódicas y seguir un tratamiento preventivo con suplementos de calcio, vitamina D y, si es necesario, medicamentos específicos.

La conciencia corporal y el entrenamiento de equilibrio también reducen el riesgo de caídas en personas mayores, uno de los mecanismos comunes de fractura del esternón.

Protección y posicionamiento en deporte y transporte

En deportes de contacto o de alta velocidad (ciclismo, motocross, esquí, fútbol americano), se recomienda el uso de protecciones torácicas homologadas que absorban impactos en el área del esternón. Estas protecciones deben adaptarse bien al cuerpo del deportista sin limitar la movilidad funcional.

En vehículos motorizados, además del cinturón de seguridad, es crucial una postura correcta del conductor. El respaldo debe mantenerse erguido, y el volante no debe estar demasiado cerca del tórax para evitar impacto directo durante una colisión.

Educación del paciente para actividades seguras tras la recuperación

Después de una fractura del esternón, es esencial que el paciente comprenda las limitaciones físicas temporales. La educación terapéutica debe incluir:

  • Recomendaciones sobre posturas seguras para dormir, sentarse y agacharse

  • Señales de advertencia ante posibles recaídas (dolor al respirar, inflamación local)

  • Importancia de la respiración controlada y la movilidad torácica progresiva

La comprensión activa del propio proceso de recuperación empodera al paciente y favorece la adherencia al tratamiento, reduciendo el riesgo de complicaciones o recaídas.


Fractura del esternón en deportistas: causas, riesgos y recuperación

Deportes con mayor riesgo de fractura del esternón

La fractura del esternón en el ámbito deportivo se produce con mayor frecuencia en disciplinas con alto impacto o riesgo de caídas. Los deportes más asociados son:

  • Fútbol americano y rugby (impacto torácico directo)

  • Boxeo, artes marciales y lucha (golpes en el esternón)

  • Ciclismo, equitación y esquí (caídas frontales con compresión torácica)

  • Motocross y deportes de motor (alta velocidad y colisiones)

Los atletas que practican estas disciplinas deben seguir protocolos preventivos y utilizar protección torácica adecuada para minimizar el riesgo.

Consideraciones especiales de rehabilitación en atletas

En deportistas, la recuperación tras una fractura del esternón debe planificarse cuidadosamente para no afectar el rendimiento futuro. Se consideran:

  • Cronograma adaptado a la exigencia física del deporte

  • Rehabilitación específica de la musculatura torácica, escapular y del core

  • Control de la respiración en situaciones de alta demanda cardiovascular

Se recomienda un enfoque funcional, incluyendo simulación progresiva de movimientos deportivos específicos, especialmente antes de volver al entrenamiento completo.

Retorno seguro al rendimiento competitivo

El retorno debe basarse en criterios objetivos:

  • Consolidación ósea confirmada por imágenes

  • Ausencia de dolor al impacto o a la respiración profunda

  • Recuperación del rango de movimiento y fuerza funcional

Se recomienda realizar una evaluación funcional por parte del fisioterapeuta deportivo antes del alta completa. En algunos casos, puede mantenerse el uso de protección torácica durante los primeros partidos o entrenamientos competitivos.


Efectos a largo plazo de la fractura del esternón en la postura y la respiración

Complicaciones crónicas frecuentes tras fractura del esternón

Aunque la mayoría de los casos evolucionan favorablemente, una fractura del esternón puede dejar secuelas a largo plazo, especialmente si no se rehabilita adecuadamente. Las más comunes incluyen:

  • Dolor persistente en el centro del pecho

  • Sensación de rigidez torácica

  • Hipervigilancia respiratoria (miedo a respirar profundamente)

Estas secuelas pueden ser tratadas eficazmente con terapia manual, técnicas miofasciales y reentrenamiento respiratorio personalizado.

Desequilibrios posturales y compensación muscular

Muchos pacientes adoptan posturas de protección tras la fractura del esternón, como encorvamiento del tronco y elevación de hombros. Esto puede generar:

  • Cifosis torácica progresiva

  • Tensión crónica en músculos intercostales, escalenos y trapecios

  • Compensaciones lumbares y cervicales

La corrección de estos patrones requiere fisioterapia centrada en la reeducación postural global, liberación de tejidos blandos y activación del sistema estabilizador profundo.

Reentrenamiento respiratorio y terapia respiratoria a largo plazo

En algunos pacientes, especialmente mayores o con antecedentes respiratorios, la función pulmonar queda comprometida tras una fractura del esternón. El reentrenamiento respiratorio incluye:

  • Respiración diafragmática controlada

  • Ejercicios de expansión costal

  • Fortalecimiento del core y musculatura accesoria de la respiración

Según investigaciones actuales, los programas de fisioterapia respiratoria tienen un impacto positivo en la calidad de vida de pacientes con secuelas torácicas (ScienceDirect).


Preguntas más comunes

¿Es grave una fractura del esternón?

Sí, una fractura del esternón puede ser grave si está asociada a lesiones internas (pulmón, corazón, vasos). Sin embargo, en la mayoría de los casos aislados, el pronóstico es bueno con tratamiento adecuado.

¿Cuánto tarda en sanar una fractura del esternón?

El tiempo promedio de consolidación es de 6 a 8 semanas para fracturas simples. En casos complejos, puede extenderse hasta 12 semanas. La rehabilitación funcional puede durar varias semanas más.

¿Puede hacer algo el médico por un esternón roto?

Sí. Aunque no se inmoviliza con yeso, el médico puede ofrecer analgesia eficaz, seguimiento radiológico, derivación a fisioterapia y controlar posibles complicaciones internas.

¿Cuánto tarda en sanar completamente el hueso del esternón?

La curación ósea completa de una fractura del esternón puede tardar entre 2 y 3 meses, dependiendo de la edad, salud ósea y complicaciones. La función completa se recupera gradualmente con fisioterapia.

⚠️ Toda la información y recomendaciones relacionadas con la salud se basan en la experiencia profesional de una fisioterapeuta y kinesióloga titulada, con varios años de práctica clínica tanto a nivel internacional como local. Estas orientaciones tienen como objetivo apoyar el bienestar general y la rehabilitación, pero no sustituyen el consejo médico.
Cada persona es única, y las respuestas a los tratamientos o ejercicios pueden variar. Por ello, se recomienda encarecidamente consultar con un médico u otro profesional de la salud antes de comenzar cualquier nueva terapia, programa de ejercicios o realizar cambios en su rutina de salud actual.
Estas directrices están destinadas únicamente a fines educativos e informativos.

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